TONTERIAS BAJO EL SOL...

Qué pensais de esto??... Es otro de los escritos de mi hermano.

El primer tema que voy a tratar surgió de una de esas mañanas en las que mi única compañía era un transistor. A veces, cuando escuchas música, no te paras a pensar en las letras de las canciones, y ni mucho menos en lo que hay detrás de esas letras. Pues sobre eso estuve pensando varios días: en lo que hay detrás de las canciones.
No hay que ser muy "inciso" para darse cuenta que desvelar lo que hay detrás de todas las canciones es una empresa demasiado ambiciosa, por lo que de momento me limitaré a sólo un tipo de canciones: aquellas en las que se habla de desengaños amorosos. Intentaré ser breve, pese a lo extenso del asunto.
El principal problema a la hora de analizar el significado de una canción es que sólo estamos oyendo la versión que nos cuenta el cantante. Aunque a priori pueda parecerlo, esto no es ninguna obviedad. Yo siempre he pensado que cuando nos cuentan una historia es necesario considerar la opinión de todas las partes implicadas, puesto que lo más probable es que todas tengan su parte de razón; pero en el caso que nos ocupa, sólo estamos oyendo a una de las partes, al solista, que utiliza su música para convencernos de que tiene toda la razón en la historia que nos cuenta.
Lo anterior se convierte en un verdadero contratiempo cuando la canción nos habla de un desengaño amoroso, de lo mal que se ha portado el/la otro/a. Vale, la relación se ha roto, alguien tendrá la culpa, pero me resulta sospechoso que todas las canciones hablen de lo mal que se ha portado el otro y que nunca haya ningún cantante que diga que ha sido un capullo y que en realidad se merecía que le diesen puerta.
Ahora me situaré: temperatura superior a los 50ºC, más o menos; los rayos del sol inciden casi verticalmente sobre mi cabeza, y en la radio suena la canción de Luz Casal, No Me Importa Nada. La letra destroza completamente al actual compañero sentimental de la artista. Nos lo pinta como un capullo insensible que engaña, ningunea y la mayoría de las veces ignora a la pobre chica. Y ella, que ya está hasta ahí mismo de tal personaje, decide ponerle por los suelos llamándole poco menos que subnormal, ya que no sólo lo describe como tal, sino que además parece indicarnos que el tipo no se entera de que ella pasa por completo de él.
¿Alguién ha oído alguna vez la versión de él? ¿Que pasaría si el pobre chaval estuviese hasta los cojones de que, después de dos o tres años de relación, ella continuase sin mostrar ningún interés por las cosas que le cuenta? Supongamos que la tía es una golfa y además bastante absorvente, obligando a su desgraciada alma gemela a dejar de lado su familia, sus amigos e incluso sus aficiones con tal de estar todo el día acompañándola a mirar ropita en Zara. Quizás el chico, harto de que ella sí que pudiese salir por ahí cuando le venía en gana, decidiese pasar del tema y hacer lo mismo, comenzando a ir al fútbol los domingos por la tarde y a elegir él de vez en cuando las películas en el video-club. Es posible que algún día le preguntase por qué la llaman tantos tíos al móvil de los que él no ha oído ni hablar, o por qué el sábado por la mañana olía a tabaco y alcohol aunque la muy perra decía que el viernes se lo había pasado en casa con amigdalitis. Es posible que el pobre desgraciado al final llegase a la conclusión de que el tal amigdalitis era el gilipollas aquel del gimnasio que siempre la acompaña hasta su casa "para que no le pase nada". Harto de estar harto, intenta acabar con la relación, pero ella tiene que inventarse una buena excusa para contar en su casa, porque a una mujer de bandera como ella no la deja ningún hombre. Faltaría más. De manera que la pava nos lo cuenta en una canción y nosotros no tenemos más remedio que creerla, ya que el presunto cabrón no tiene aptitudes para la música y no puede hacernos llegar su versión a través de los 40 principales.
No sé si a estas alturas ya habéis entendido lo que quiero decir. Con independencia de la canción que sea , el esquema es aplicable a la mayoría de canciones que hablan de desengaños amorosos. El que canta es el puteado y el otro es la puta o el cabrón, según sea masculino o femenino. Porque el género no importa: siempre es la misma historia. Los Secretos, Déjame. Canta un hombre que está hasta los huevos de su pareja y la manda a tomar viento, pero en lugar de decirselo de forma discreta lo pregona a los cuatro vientos en forma de canción para que todo el mundo lo oiga. Bien, chaval, a lo mejor ella estaba esperando la ocasión de que se lo dijeses porque en realidad es ella la que está harta de ti pero le da pena decirtelo porque en realidad eres un pobre desgraciado y ella es demasiado buena persona como para dejarte, porque sabe que en cuanto lo haga volverás a dejarte el sueldo en la máquina recreativa del bar de la esquina y a fumar heroína, como hacías antes de que ella te recogiese de la calle. Te paga la desintoxicación, te consigue un trabajo, rehace tu vida, y ahora que eres mínimamente independiente decides mandarla a la mierda porque crees que ya no te hace falta, acusándola encima de que juega contigo, de que le has dado oportunidades y ella no ha cambiado... le pides que te deje "seguir tu camino". Ya me gustaría a mi oir lo que piensa esa santa de todo esto.
Se me ocurren muchas otras canciones para poner como ejemplo, pero resultaría demasiado largo, así que os invito a que recapaciteis sobre el tema y hagais memoria. Recordad canciones que tratan sobre el tema e intentad poneros siempre del otro lado, no del lado del que canta, sino del lado del ofendido, aquel que no tiene posibilidad de respuesta. En realidad, lo ideal sería que todas estas canciones se cantasen como las cantaba Pimpinela, eso si que era oir a las dos partes.

A mi me parece que lleva razón.

Feliz semana a todos!!.